Páginas

Yelmo de Dánao

¿Cómo escoger marido para tus cincuentas hijas si piensas matarlos en la noche de bodas y te importa un rábano con cual se case cada una de ellas? Dánao lo resolvió de varias maneras, pero, mayormente, echando las suertes en un yelmo –o tal vez introduciendo los nombres de las danaides en un yelmo y los de los hijos de su hermano Egipto en otro, y dejando que el azar decidiera la formación de las parejas en las extracciones sucesivas. El azar se volvió contra él y escogió una de las parejas, la de Hipermestra y Linceo, con malévola intención. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario